El proyecto se ubica en el borde de Pica generando el traspaso espacial del oasis al
desierto. La hostal se divide en dos propuestas o estructuras: el trazado del sendero y
sus pausas. El sendero conduce al viajero por los puntos más importantes del trayecto,
y las pausas se configuran, por medio de la arquitectura, en aquellos sitios que por sus
condiciones de ubicación, orientación, valor paisajístico, histórico o arqueológico, tengan la
potencia para convertirse en lugar.
Punto importante es la propuesta de completar el tramo faltante del Sendero de Chile,
desde Pica hasta el Salar del Huasco, a través de una ruta para hacer a pie y/o apoyados por
animales de carga, considerando las potencialidades y diferencias del hombre para recorrer
los territorios, y reconociendo la experiencia del recorrido, como instancia necesaria para
crear un vínculo fuerte entre el viajero y el paisaje.
El proyecto propone un master plan para la zona de la cocha Concova, en el cual
el pozón se interviene lo menos posible a fin de preservar el entorno natural. La idea es
generar en todo su entorno un área turística.
El proyecto se ubica en la primera sección del sendero, en el lado sur de la cocha,
liberando el borde contrario, lo que permitirá la ubicación de un posible proyecto de similares
características, que termine por concretar la activación de la cocha Concova.
El proyecto se extiende a lo largo del tramo como volúmenes dispersos que contienen
el programa, donde el sendero establece los vínculos entre cada espacio y el exterior,
generando por medio de agrupaciones las distintas zonas del proyecto.
El paisaje entonces se vincula con el hombre constantemente en los espacios
exteriores; y en los interiores el paisaje se muestra contenido en encuadres, que permiten
entregar una nueva forma de mirar el paisaje.