Abstract | dc.description.abstract | El objetivo general del presente trabajo de título es comparar dos modelos de contratos, los cuales afrontan un proyecto desde dos ángulos muy distintos con respecto a manejo de riesgos y manejo de información. De acuerdo a esto, se buscó encontrar qué tipo de modelo conlleva una mayor eficiencia en términos de plazos y costos.
Hoy en día, el ministerio de Obras Públicas enfrenta los proyectos en gran mayoría mediante el modelo de contrato Diseño-Licitación-Construcción. La espera por diseños detallados, realizados con la finalidad de controlar los costos de construcción, produce un aumento en los plazos totales de los proyectos. En algunos casos sería posible disminuir los plazos, sin poner en riesgo los costos, con otro modelo de contratación.
Bajo esta premisa, se estudió un universo contractual en el cual se clasificaron los modelos de contrato más utilizados, confeccionando fichas para cada modelo a comparar.
Para llevar a cabo el estudio, el mercado fue analizado mediante el método de Benchmarking, estudiando experiencias de obras públicas nacionales bajo el modelo Diseño-Licitación-Construcción y obras públicas de Estados Unidos bajo el modelo Diseño-Construcción. Este análisis se basó, en índices relativos a plazos y costos del proyecto.
El resultado final de los análisis llevados a cabo, entregaron diferencias de eficiencia cuando los índices correspondían a plazos. Con respecto a los índices de costos, las significancias fueron nulas. Las magnitudes asociadas en el análisis reflejaron que no hay contundencia para una conclusión global certera, sin embargo, se puede inferir que en términos de plazos el modelo de contrato Diseño-Construcción es más eficiente que el modelo Diseño-Licitación-Construcción.
Las comparaciones no solo son cuantitativas, sino que también cualitativas, es decir, hay otra información que respalda la mayor eficiencia del tipo de contrato Diseño-Construcción, por ejemplo, existe una experiencia mundial que avala el hecho de utilizar este tipo de contrato, en proyectos que tienen ciertas características. Por lo anterior es de esperar, que en Chile se aproveche esta experiencia en el ámbito público, y se de paso al desarrollo de proyectos bajo nuevos modelos de contratación que optimicen procesos y recursos. | |