Abstract | dc.description.abstract | La vitivinicultura en Chile ha alcanzado gran desarrollo en las últimas décadas, en especial desde 1997 en adelante. Sin embargo, a pesar de sus altas tasas de crecimiento, tanto en niveles de producción como de exportación, no parece haber un aporte real al desarrollo de las áreas rurales en que se produce, como sucede en la VII región del Maule, la región más especializada del país en este rubro. Dicho desarrollo se debería basar en el fortalecimiento a los encadenamientos productivos – tales como la relación insumo-producto- y no productivos – tales como la existencia de capitales sociales y culturales. Contrariamente a lo previsto, la expansión de la actividad vitivinícola moderna ha generado ciertos desencadenamientos entre las industrias y la vitivinicultura tradicional, lo que redunda en un bajo aporte al desarrollo de la población local. Se observan grandes diferencias en los niveles de desarrollo que presentan, al interior de un mismo valles, los lugares modernizados, las áreas de producción tradicional y aquellos que se encuentran en transición entre ambos estados. | en |