Estudios Internacionales, vol. 36 n° 140: pp.29-53, 2003
en_US
Identifier
dc.identifier.issn
0719-3769
Identifier
dc.identifier.uri
https://repositorio.uchile.cl/handle/2250/126756
Abstract
dc.description.abstract
Las negociaciones diplomáticas que se llevaron a cabo en Johannesburgo entre el 24 de agosto y el 4 de septiembre de 2002 se iniciaron con pesimismo. Diez años después de la Conferencia de las Naciones Unidas sobre el Medio Ambiente y el Desarrollo (CNUMD), la Cumbre de la Tierra de Johannesburgo pretendía servir de foro para evaluar el cumplimiento de los compromisos de Río y, en especial, para reafirmar la disposición de todos los países a cumplir con las metas propuestas en 19921. Pero las reuniones preparatorias revelaron claramente que en Sudáfrica la negociación no sería fácil, ya que no bastarían los compromisos políticos, sino que se buscarían acuerdos sobre acciones concretas para la aplicación del Programa 21 y los demás acuerdos de la CNUMD.