Abstract | dc.description.abstract | A pesar de que a primera vista la cuestión de los objetos voladores no identificados parece una temática archiconocida y archimanida, luego del más mínimo examen a la “información” disponible, se hace evidente que ésta es escasa o nula.
Desde luego, los ovnis siempre son noticia. Su atractivo es casi universal y cualquiera sea nuestro grado de cultura nos invitan a hacer una infinidad de preguntas, partiendo por la más obvia: ¿QUÉ son?
Por motivos que aún se discuten, sin embargo, la tendencia vulgar, cuando se habla de ovnis, es asociarlos de inmediato con naves venidas del espacio exterior. Las consultas más repetidas, por lo tanto, dan un salto arbitrario hacia la certeza y suelen restringirse a ¿QUIÉNES son?, y, desde ahí, a variaciones algo pueriles sobre su “naturaleza” inteligente.
Si es por lo que vemos en los medios de comunicación, el tema se alimenta de los despojos de una racionalidad abatida, condenado al rincón de la superchería y del sensacionalismo. Su vaguedad es tal que parece incapaz de trascender el lugar común, la observación frívola, la especulación caprichosa y la redacción inconsistente de un Periodismo fácil que, de vez en cuando, llena treinta segundos de televisión, o alguna página izquierda en un diario, con uno o dos testimonios de “extrañas luces en el cielo”.
El interés fundamental del texto que tienes en tus manos es intentar una aproximación desprejuiciada a los datos concretos que maneja Ufología nacional. En otras palabras: contextuar la frase ovnis en Chile en la actividad seria y sistemática - si es que la hay - por parte de individuos y agrupaciones dedicados al rastreo y registro de informes sobre el fenómeno. | en_US |