Abstract | dc.description.abstract | El documento que se presenta a continuación es un análisis del Proyecto
de Ley de Educación Superior (PLES), enviado al parlamento para su
discusión en julio de 2016. Fue producto de largas sesiones del Grupo de
Trabajo sobre Reforma a la Educación Superior del Senado Universitario, que
se prolongaron hasta comienzos de 2017. En el intertanto se conocieron diversas
propuestas de modificaciones ("minutas"), cuyo análisis fue incorporado,
en tanto fue posible, al estudio más de fondo y estratégico de las ideas
del proyecto. Los siguientes párrafos indican brevemente las modificaciones
propuestas por el Gobierno, conocidas cuando este estudio estaba terminado.
Desde el momento de su envío al parlamento para su discusión, el
Proyecto de Ley de Educación Superior ha sido objeto de un agitado debate
público. En este marco, el gobierno planteó la intención de introducir modificaciones
y, en este inicio de 2017, se anunció que el proyecto original va a
ser separado en dos proyectos, uno que engloba las regulaciones al Sistema
Nacional de Educación Superior y otro que se aboca a la Educación Superior
Estatal.
Respecto del sistema en general, lo que ha sido difundido y con la
incertidumbre que ha sido la tónica de todo el proceso, indica que han sido
eliminados importantes controles y definiciones cuyo objetivo era ordenar y
regular el sistema de educación superior privado, dejando intocados temas
tan sensibles como el Crédito con Aval del Estado (CAE).
Por otro lado, el Sistema de Educación Superior Estatal continúa desprovisto
de elementos que permitan su fortalecimiento real, su autonomía,
expansión y desarrollo, dejando la mayor parte de la cobertura del sistema en
manos privadas y manteniendo una propuesta de gobierno universitario que
desconoce los procesos democráticos que las comunidades universitarias han
desarrollado. En el caso de la Universidad de Chile, la nueva institucionalidad
parece hacer desaparecer o subordinar a otras estructuras: al Consejo Universitario,
al Consejo de Evaluación y al Senado Universitario, a quien quita la
mayor parte de sus atribuciones.
En definitiva, el núcleo del sistema -una educación superior concebida
como "bien de consumo" y sus instituciones como empresas lucrativasparece
no ser revertido en esta propuesta, manteniendo la actual arquitectura
del Sistema de Educación Superior y, más aún, fortaleciendo el rol subsidiario
del Estado y reduciendo la educación superior y las tareas que cumple a
servicios cuya función es esencialmente económica. Finalmente, aunque se
ofrece legislar separadamente para las instituciones estatales, éstas no son
concebidas como el eje estructural de la educación superior. En el estado actual
de las propuestas, se mantiene la prohibición de crecer para cumplir su
rol, dejando intocado, de esta manera, el espíritu del sistema creado durante
la dictadura. | es_ES |