Abstract | dc.description.abstract | Estudios han determinado que los niveles de contaminación a los que está llegando el planeta, lo acercan a un punto de no retorno en el que éste podría colapsar y dejar de ser habitable para el ser humano. Esta problemática, posiblemente representa el desafío más grande al que se enfrenta la humanidad hoy en día, y es por esto que todos deben ser parte del cambio necesario para revertirla.
Esta tesis busca formar parte de la solución que requiere el planeta, apoyándose en la educación superior universitaria como conductora del cambio, y específicamente a través de una nueva Universidad Medioambiental, que ofrezca maestrías en Negocios Verdes y esté ubicada en Costa Rica. El trabajo tiene como objetivo principal identificar, dimensionar y evaluar las condiciones técnicas, legales, organizaciones y económicas requeridas para el establecimiento de esta institución; y complementa lo anterior con una serie de análisis estratégicos sobre las condiciones internas y externas asociadas al proyecto, lo que a su vez permite identificar los riesgos y factores clave de éxito.
Una investigación bibliográfica del mercado y de la industria local y global permite validar la existencia de un mercado, en base al cual se estima una demanda inicial para la Universidad de 5 estudiantes por maestría. Posteriormente se define que la Universidad partiría con una oferta de 5 maestrías, enfocadas en atender necesidades actuales del mercado y alineadas con los objetivos ambientales de Costa Rica y el mundo, según la opinión de expertos.
De llevarse a la implementación, el proyecto sería desarrollado por la Sociedad San Cristóbal, en la que participan personas de gran trayectoria en el campo ambiental y político como los son José María Figueres, expresidente de Costa Rica y actual presidente de Carbon War Room, y Cristiana Figueres, exsecretaria general de la Comisión Marco de las Naciones Unidas contra el Cambio Climático. A ellos podría sumarse como colaborador externo a la sociedad, Carlos Rodríguez, Vicepresidente de Conservation International y ex Ministro de Ambiente y Energía de Costa Rica.
Lo anterior forma parte de una de las principales fuentes de ventaja competitiva que podría tener el negocio, sumándose a la definición de Costa Rica como sede para el proyecto, por su liderazgo mundial en temas ambientales, por las condiciones de inversión favorables que tiene el país; y por la poca competencia existente.
Finalmente, la evaluación económica del proyecto muestra una inversión requerida de USD $2,3 millones aproximadamente, con flujos de caja positivos a lo largo de todo el periodo de evaluación (10 años). Las proyecciones realizadas arrojan un VAN de USD $764.677 con una TIR de 19%, que se encuentra por encima de la tasa de descuento calculada (12,2%). Estos indicadores llevan a concluir que el proyecto es conveniente y tiene potencial de generar riqueza para los inversionistas, sin embargo, quedando condicionado al diseño de un proceso de reclutamiento de primer nivel, que se apoye en alianzas estratégicas con universidades de renombre y con Organizaciones Globales de carácter ambiental. Aspecto que será crítico para asegurar o superar la demanda esperada, y protegerse de la alta sensibilidad que presenta el proyecto ante esta variable.
Como recomendación final, se motiva a San Cristóbal a dar continuidad a la implementación del proyecto por su carácter de impacto y viabilidad económica. | es_ES |