El ejercicio de la Potestad Organizatoria de la Administración del Estado bajo el estándar de buena administración: revisión a la jurisprudencia administrativa de la Contraloría General de la República entre 2016-2021

Abstract

La potestad organizatoria que le asiste a la Administración para ajustar su conformación interna de cara a la actuación administrativa, resulta central para el adecuado cumplimiento de las funciones que el ordenamiento ha puesto bajo su tutela. Es en este contexto, la introducción de la buena administración como un estándar de conducta de Administración, permite la satisfacción del interés público involucrado, determinar y ponderar el grado de cumplimiento de sus especiales cometidos. El ejercicio de la potestad organizatoria bajo la buena administración en cuanto estándar de conducta, tendrá ribetes especialmente prácticos. Bajo este contexto, este trabajo identifica y aborda como problema, que la falta de tratamiento por la doctrina de la potestad organizatoria mediada por la buena administración trae como consecuencia una falta de desarrollo adecuado de los principios y jurisprudencia existente, con una mayor densidad normativa, de manera que la materialización de los fines específicos de cada organismo sea real, concreta y efectiva. Así, su objetivo principal es dar cuenta sobre la aplicación práctica que ha tenido la buena administración en la jurisprudencia administrativa de la Contraloría General de la República durante el período 2016-2021, considerando una mayor o menor vinculación con la potestad organizatoria. Para ello, en primer lugar, por una parte, contendrá una exposición tanto de la potestad organizatoria de la Administración del Estado, como de la buena administración en el derecho chileno. Luego, en segundo lugar, en la dimensión práctica de este trabajo, se contienen los resultados de la recopilación y análisis de los dictámenes de la Contraloría General de la República emitidos durante el periodo comprendido entre los años 2016 y 2021, y que refieren fundamentalmente a la buena administración, además de la forma en que ha sido aplicada en diversas materias. Se propone en este trabajo que la buena administración como un estándar ha sido recogida en los dictámenes de Contraloría a través del uso de diferentes expresiones con relativa uniformidad, y que al mismo tiempo, ha sido aplicada de forma más intensa en materia estatutaria y financiera, vinculándose en este punto de manera más explícita con la potestad organizatoria, que en los dictámenes referidos a otras materias, como la contratación o procedimiento administrativo donde exhibe una relación mucho más implícita