Efectos morfológicos sobre espacios públicos abiertos en un contexto de riesgo geológico : la Falla San Ramón (FSR) en el sector nororiente de Peñalolén 2017-2021

Abstract

La preocupación sobre los desastres socio naturales, y la alta exposición de las ciudades ante ellos está tomando cada vez más relevancia en la opinión pública. Para un desarrollo urbano resiliente y ambientalmente sostenible, la Nueva Agenda Urbana de 2016 promueve la creación de “redes bien conectadas y distribuidas de espacios públicos de calidad, abiertos, seguros, inclusivos, accesibles, verdes y destinados a fines múltiples” (ONU-Habitat, 2017: 23). En ciudades constantemente afectadas por eventos sismológicos, los espacios públicos, especialmente los abiertos, constituyen un componente clave en la gestión del riesgo de desastres. Estos se convierten en elementos latentes para la reorganización y adaptabilidad de la ciudad post desastre, sin embargo, este valor no es reconocido en la regulación urbana de los Instrumentos de Planificación Territoriales de nuestro país (Rodríguez y Wirsching, 2016). La presente investigación tiene por objeto el estudio de espacios públicos abiertos de barrios residenciales del piedemonte cordillerano afecto a la Falla San Ramón. Se escogió como caso de estudio los barrios residenciales San Tadeo y Olga Leiva de la comuna de Peñalolén, en donde se busca comprender el impacto que tiene la morfología urbana y sus indicadores urbanos sobre estos espacios públicos abiertos y en su capacidad para conformar un sistema urbano que mitigue el riesgo asociado a la emergencia sísmica en un marco de resiliencia urbana. Los resultados indican que existe una fuerte relación entre los indicadores urbanos de tipología funcional ligados a las densidades y usos de suelo con la eficiencia del sistema de espacios públicos abiertos para responder en eventos sísmicos y periodos post-emergencia. Se establece que la eficiencia de este sistema depende de los valores de densidad poblacional, superficie de los espacios públicos, pendiente, presencia o ausencia de elementos antrópicos y vegetación, distancia y altura de las viviendas cercanas. En este sentido, se concluye que la construcción del concepto de resiliencia en el diseño urbano debe realizarse desde las condiciones y características de los escenarios locales, poniendo énfasis en la diversidad de componentes de la morfología urbana y actores que conforman la comunidad y el territorio determinado.