Abstract | dc.description.abstract | Durante el desarrollo de este trabajo, abordaremos el estudio de la supuesta crisis de legitimidad del Derecho penal, y de la respuesta que desde el abolicionismo se da frente a ella. Para esto partiremos de dos hipótesis de trabajo que intentaremos comprobar:
1º Efectivamente, el Derecho penal moderno se encuentra en crisis. Esta es una crisis de legitimación que se expresa en la notoria pérdida de sentido de este subsistema, con violaciones manifiestas a los principios básicos que tradicionalmente se entiende que lo informan, lo que se traduce en un aumento generalizado de la irracionalidad penal, que hace perder a éste muchos de los elementos que lo han hecho ser considerado una garantía para los individuos frente al poder punitivo del Estado.
2º La abolición del Derecho penal no es la respuesta adecuada a la crisis. Pese a sus falencias, el Derecho penal aún está llamado a cumplir determinadas funciones sociales, que van más allá de la mera represión de las conductas delictivas.
Para demostrar la primera hipótesis, primeramente expondremos el modelo en base al cual hemos de realizar el análisis. Como ya anteriormente hemos afirmado, decir que el Derecho penal se encuentra en crisis no puede ser una afirmación «aséptica», necesariamente requiere una toma de posición para escoger un modelo que nos permita decidir si, de acuerdo con éste, efectivamente existe una crisis. En nuestro caso, optaremos por hacer uso del modelo elaborado desde el garantismo, ya que nos parece el más adecuado y el que en términos generales mejor nos interpreta.
Una vez expuestas las características generales del modelo de legitimación garantista, realizaremos un breve diagnóstico de la situación actual del sistema penal en general, a objeto de definir en base a éste si existe o no una crisis del Derecho penal, de acuerdo a los parámetros de validez exigidos por el garantismo.
Definida la situación del Derecho penal contemporáneo, nos avocaremos con posterioridad a exponer lo que son los puntos centrales de las doctrinas abolicionistas, para lo cual nos serviremos del análisis de lo dicho por sus principales representantes.
Definida la salida que los abolicionistas dan a esta presunta crisis del Derecho penal, intentaremos demostrar por qué esta resulta una respuesta inadecuada. Finalmente, en las conclusiones de este trabajo, trataremos de esbozar una teoría básica de lo que a nuestro entender debe ser el camino necesario para salir de la presunta crisis del Derecho penal, y así arribar a una relegitimación de éste. | es_CL |