Evolución magmática de islas oceánicas: revisión de la isla de Flores (archipiélago de las Azores, Portugal)

Abstract

Flores corresponde a una isla oceánica de 142 km2 de superficie perteneciente a las Azores (Portugal), un archipiélago de nueve islas que se formó por volcanismo intraplaca tipo hotspot y que se encuentra ubicado en las cercanías del punto triple entre las placas norteamericana, euroasiática y de nubia, en la mitad del oceánico atlántico, entre 40° y 36° 45 de latitud norte y 31°30 y 25° de longitud oeste. A través de análisis petrográficos de lavas y diques pertenecientes a las 4 unidades volcanoestratigráficas de Flores, se identificaron que estos productos volcánicos se pueden agrupar en dos familias según su textura: rocas porfídicas con macrocristales de tamaño superior a 2 mm de olivino, clinopiroxeno, plagioclasa y en menor cantidad anfíbol, los cuales están inmersos en una masa fundamental microcristalina de olivino, clinopiroxeno, plagioclasa, minerales opacos y escaso apatito; además de una segunda familia correspondiente a rocas de textura microlítica con las fases minerales de la masa fundamental de las rocas porfídicas. A través de análisis con microsonda electrónica se identificaron que la mayoría de los macrocristales de las rocas porfídicas se encuentran en desequilibrio químico con la masa fundamental que los rodea y, por lo tanto, corresponderían a antecristales que se formaron a partir de fundidos de origen más primitivo. Por otro lado, la composición de las rocas microlíticas es equivalente a la masa fundamental de las rocas porfídicas, por lo que se deduce que tendrían un origen común, formados a partir de fundidos más evolucionados Estos últimos fundidos son producidos por procesos de cristalización fraccionada repetidos en el tiempo, ocurridos en reservorios ubicados a profundidades máximas de ~16 km, generando enclaves gabroicos por acumulación de los minerales fraccionados que incluyen olivino, clinopiroxeno, plagioclasa, kaersutita y apatito. Además, estos fundidos residuales se extraen al alcanzar un 50% de fraccionamiento, contienen MgO < 6 wt. % y dan lugar a las rocas microlíticas. Algunos de estos fundidos pueden ascender arrastrando antecristales a la superficie, formando así las lavas porfíricas. Los altos contenidos de MgO (hasta un 9 wt. %) y las composiciones primitivas de las rocas porfídicas se explican por el efecto de la acumulación de antecristales olivino de mayor contenido de Fo, clinopiroxeno con mayor #Mg y en menor medida plagioclasa con mayor contenido de An. Esto permite deducir que las composiciones primitivas anteriormente reportadas como de fuente mantélica no serían tal, sino producto de este proceso de acumulación. Este proceso coincide con lo descrito para Corvo y Graciosa dentro del archipiélago y podría ser extrapolable a otros sistemas de islas oceánicas. Esto último conlleva a realizar un revisión petrográfica y geoquímica a nivel mundial para dilucidar de mejor manera los procesos magmáticos que dan origen a este tipo de volcanismo.