Trayectoria del investigador/a en Chile : evaluación y propuestas de mejoras para la política científica en base al FONDECYT de iniciación

Abstract

El Fondo Nacional de Desarrollo Científico y Tecnológico (en adelante, FONDECYT), es el instrumento de investigación científica más importante en inversión pública en Chile. Creado en 1981, es el primer instrumento público fuera del sistema universitario, directamente destinado a financiar investigación científica en el país. Hoy, su objetivo es “promover la investigación de base científico-tecnológica en las diversas áreas del conocimiento, mediante el financiamiento de proyectos de investigación individual de excelencia orientados a la producción de conocimiento” [1]. En la actualidad el FONDECYT cuenta con tres líneas: Regular (1981); Postdoctorado (1991); Iniciación (2006) y todas ellas tienen como público objetivo a personas con grado de doctor o especialización en salud. Su modalidad más reciente, el FONDECYT de iniciación, busca financiar a investigadores con menor trayectoria de investigación o, como se denominaron en sus bases concursables, “nuevos investigadores”. El objetivo de esta nueva línea es “…fortalecer el desarrollo de la investigación científica y tecnológica de excelencia a través de la promoción de nuevos investigadores(as), mediante el financiamiento de proyectos de investigación…” [2]. Al 2022, la Agencia Nacional de Investigación y Desarrollo (en adelante, ANID), institución creada en 2018 por ley N°21.105 [3], dependiente del Ministerio de Ciencia, Tecnología, Conocimiento e Innovación (MINCTCI, en adelante) y que alberga el programa, ejecutó cerca de un tercio de su presupuesto en este programa. Esto corresponde a la ejecución de $136.604.136 mil millones de pesos de un total de $427.386.393 mil millones de pesos, lo que ilustra su importancia para la institucionalidad científica y tecnológica1 [4]. Dentro de ello, el FONDECYT de iniciación ejecuta un 15% del presupuesto total hacia las tres líneas de este programa. En cuanto a la existencia del programa de Iniciación, esta coincide con la gran masa de doctorados chilenos que se está generando hoy. Desde 1995 al 2019, la cantidad de doctorados chilenos graduados ha aumentado de 1.095 a 6.095 [5]. Al mismo tiempo, Becas Chile, el principal programa de financiamiento a programas de postgrado tanto nacional como internacional, ha tenido un aumento gradual importante, teniendo en promedio alrededor de 520 graduados de doctorado entre los años 2006 y 2021 [6]. Este indicador es importante para entender el aumento de la matrícula de personas con grado de doctor que podrían ser posibles postulantes al FONDECYT de Iniciación o, en lenguaje del instrumento, “nuevos investigadores”. A pesar de ello, se desconoce si este instrumento potencia realmente las carreras investigativas de estas personas. Considerando la relevancia del instrumento FONDECYT en su línea de Iniciación para la renovación e inserción de los “nuevos investigadores” en el Sistema Nacional de Ciencia, Tecnología, Conocimiento e Innovación (en adelante, CTCI) [7], cabe preguntarse ¿El programa del FONDECYT de iniciación cumple con el propósito de fortalecer las carreras de investigación de estos nuevos investigadores?