Abstract
La pequeña ciudad de Waldkirch, cuna y capital del organillo europeo con más de
200 años de tradición, ubicada en el corazón de la Selva Negra alemana, será
estremecida de golpe por una visita inimaginada. Desde la comuna de San Ramón,
en Santiago de Chile, tres generaciones de organilleros chinchineros llegarán a
reescribir la historia del instrumento a fuerza de cuecas, bombos y platillos.
General note
Memoria audiovisual para optar al título de Periodista