Abstract | dc.description.abstract | En la teoría económica, un componente importante de todo mercado competitivo es el consumidor, y una característica elemental es que esté informado, de manera de maximizar correctamente su beneficio sujeto a sus restricciones. Cuando el supuesto de información completa es violado se generan una serie de imperfecciones en el mercado.
Si bien en la realidad escasamente se cumplen estos supuestos, si se asume que en general el consumidor presenta información suficiente para participar en los mercados, y se proveen mecanismos para corregir las imperfecciones provenientes de las asimetrías de información. Sin embargo, a lo largo de su vida los individuos se enfrentan a decisiones económicas importantes, que muchas veces no son capaces de abordar de la mejor manera debido al escaso conocimiento financiero que poseen.
Una de las decisiones financieras más relevante es la relacionada con el ahorro previsional. Dadas las preferencias de alisamiento de consumo de los individuos, la teoría del ciclo de vida plantea que es necesario ahorrar en la etapa en la que trabajamos para poder tener recursos en la vejez. Pero por diversas razones (miopía, mentalidad de corto plazo, elevado grado de impaciencia, etc.), los individuos por sí solo no siempre son capaces de generar ahorros previsionales, razón por la cual se establece su obligatoriedad.
Si bien en nuestro país solo un grupo selecto de individuos participa directamente en el mercado de capitales, debido a su complejidad y a los conocimientos específicos que se requieren para hacerlo (además de los requerimientos legales), todos los trabajadores formales tienen la obligación de cotizar, y con esto son parte del mercado de los fondos de pensiones, que a su vez transan en los mercados financieros. Estos fondo son gestionados por las AFPs, cuyo rol es justamente administrar los ahorros previsionales de sus cotizantes, simplificando las decisiones de inversión de estos, ofreciéndoles cinco fondos con distinto riesgo asociado (desde el más riesgoso A, con hasta un 80% de renta variable y el resto renta fija, hasta el E con solo un 5% máximo de renta variable).
Los individuos entonces sólo deben elegir el tipo de fondo en que desean tener sus ahorros (habiendo recomendaciones y restricciones por edad), y la administradora que desean que gestione sus fondos.
Esta elección del consumidor, debiera generar competencia en el mercado de las administradoras, produciendo los incentivos adecuados, para que estas empresas maximizaran el retorno de los fondos con el objetivo de captar más clientes. Pero cuando los cotizantes no tienen los conocimientos financieros necesarios acerca del sistema, su decisión puede verse influida por diversas variables que no son precisamente el objetivo final de su elección. Es así como las elecciones de AFP se ven más influidas por los regalos asociados a la afiliación o por la habilidad del ejecutivo, que a las comisiones cobradas o las rentabilidades entregadas por la AFP.
Esta es una de las consecuencias asociadas a la baja alfabetización financiera en la población, y como las demás, tiene su foco en la limitación de los individuos para optimizar sus decisiones económicas. Lo que justifica una regulación permanente y cambiante por parte del estado, para corregir las imperfecciones en el mercado y velar por el interés de sus ciudadanos.
Este trabajo pretende generar evidencia de esta carencia de conocimiento en la población cotizante, y como se relaciona el grado de información que auto reportan los individuos con ciertas características socioeconómicas. Se analiza la evolución del conocimiento financiero, comparando el grado de información que dominan los cotizantes según la encuesta de previsión social de 2009, respeto a un trabajo previo con datos del 2002: Berstein y Ruiz (2005).
A continuación se realiza un breve análisis del contexto actual del mercado previsional en Chile, junto con una revisión de antecedentes acerca de la cultura financiera a nivel global, abordando la evidencia que hay al respecto en otros países, junto con las implicancias y propuestas desarrolladas en investigaciones previas. En la siguiente sección se detallan las variables y datos a utilizar, la construcción del Índice de Conocimiento Financiero, y estadística descriptiva de la muestra respecto a este. Luego se explicará la metodología de las estimaciones a realizar, basadas en un modelo de regresión ordinal, para continuar exponiendo los resultados y comparándolos con los reportados en 2002. Finalmente se expondrán las conclusiones, junto con las principales implicancias que se derivan del estudio | es_ES |