Abstract | dc.description.abstract | La presente tesis se desarrolla bajo un modelo de práctica como investigación. Esto quiere decir que la fuente de los conocimientos que obtenga provienen desde una práctica que es pulsada por una fundamentación teórica, donde la pregunta articuladora que la origina tiene una clara intención de intervenir en el tejido social donde dicha práctica se encuentra inmersa; haciendo dialogar constantemente al contexto, el objeto artístico y al artista creador, quien toma para sí la capacidad de reflexionar teóricamente sobre los procesos, por sobre los productos, que lleva a cabo. De esta forma, como plantea Josette Féral, el artista reivindica su derecho a contribuir al saber, a todo el saber, práctico y no práctico, con la misma legitimidad de la obra más clásica1. Al igual que Feral, para José Antonio Sánchez, el campo de la investigación artística es el proceso de creación2. Así, la práctica artística se deja situar, analizar, fijar; trascendiendo su carácter efímero y constituyéndose como testigo presente de nuestra historia. Este modelo proviene de una convicción de que el arte promueve un tipo de saber que merece y debe estar a la altura entre los otros saberes, esto es, el conocimiento de nuestras emociones personales y subjetivas, a través de las cuales, conocer nuestro propio paisaje interior3. Amplía de esta forma, las posibilidades de aportación que un artista puede ejercer sobre el medio en que se encuentra. Por sobre un objeto cerrado y/o la respuesta a una pregunta, el modelo de práctica como investigación propone un entramado de pensamientos, búsquedas y conocimientos que surgieron durante el proceso de creación, poniendo conciencia en los procedimientos que articulan dicho pensar. | es_ES |