Condiciones de accesibilidad para personas en silla de ruedas en el sistema de transporte público de Santiago

Abstract

La Ley N°20.422, que Establece Normas sobre Igualdad de Oportunidades e Inclusión Social de las Personas con Discapacidad, que actualmente rige en el país indica que todos los medios de transporte público urbano de pasajeros deberán ser accesibles y utilizables de forma autovalente y sin dificultad por personas con discapacidad, especialmente por aquellas con movilidad reducida (Ley 20.422 Art. 28) , recayendo en el Estado, como ente regulador, adoptar normativas que dirijan al transporte a la condición de accesible, en lo cual se busca progresar pero, la falta de normativa actualizada no permite una correcta implementación de la accesibilidad en el Transporte público. Este trabajo busca determinar el nivel de accesibilidad universal del sistema de transporte público Red Metropolitana en superficie para personas en silla de ruedas. El enfoque se radicó en los buses urbanos, ya que estos deben poder adaptarse, dentro de lo razonable, a las distintas condiciones que presenta la infraestructura y vías de la capital, para permitir el acceso de pasajeros en silla de ruedas. Inicialmente, se estudió normativa de Brasil, Estados Unidos, España y la Comisión Europea de la ONU, buscando el enfoque de la búsqueda de información sobre accesibilidad universal en la flota de buses de Santiago. En esto se detectó que el enfoque no es solo en el abordaje del pasajero en silla de ruedas, sino también las condiciones de viaje, seguridad e interacción con los pasajeros. Para desarrollar lo anterior, se estudió características del viaje, seguridad y rampas para infraestructura en casos ideales en distintos modelos de buses facilitados por los operadores. Obtenidos los datos anteriores, se adaptó el Lab. de Dinámica Humana de la Universidad de Los Andes para emular y testear con voluntarios condiciones idealizadas de distintos parámetros de accesibilidad universal, buscando la máxima brecha vertical a considerar como accesible utilizando rampas de tres largos distintos, tres tipos de biseles y dos sillas de ruedas, urbana y ortopédica. Del trabajo anterior se determina que la pendiente máxima normada en Chile (12%) es accesible para todos los voluntarios en todas las configuraciones de largo de rampa y bisel estudiados en laboratorio, sin embargo, los modelos de buses catastrados no alcanzan este valor, por lo que se proponen nuevos parámetros accesibles en base a los resultados de las pruebas realizadas, concluyendo que solo dos de los modelos catastrados cumplen dicha condición. Luego, se comparó con estudios anteriores, determinando que la inexperiencia de los voluntarios puede influir en el máximo largo de rampa recorrido con la pendiente máxima accesible, siendo 21% en rampas de 1,2 metros en estudios anteriores y 22,4% en rampas de 0,8 metros en este caso. Finalmente, se tiene que la configuración con rampa de largo 80 cm y bisel intermedio permite una mejor accesibilidad con 14 centímetros de brecha vertical ya que, para la rampa de 70 cm, la pendiente obtenida no permite acceder a todos voluntarios y, en los casos de longitud 90 cm, el recorrido requiere un mayor impulso, limitando el acceso. Con respecto al bisel, este fue escogido porque posee un comportamiento similar con ambos tipos de silla de ruedas, a diferencia de los otros, cuyos resultados varían con un tipo de silla en específico.