Abstract
En toda economía moderna los agentes económicos, tanto personas como
empresas, anticipan sus necesidades futuras surgiendo así la tendencia a ahorrar
e invertir.
Podemos definir el ahorro como aquella parte de la renta o el ingreso que
no se destina al consumo presente.
El ahorro al interior de una economía puede ser captado de diversas formas
y por variadas instituciones que se diferencian unas de otras en base a dos
factores: el riesgo y la rentabilidad.