El observatorio de compras públicas y sus competencias de control en la administración digital del Estado

Abstract

El modelo actual de compras públicas fue diseñado con el objeto de evitar los problemas que aquejaban a la Dirección de Aprovisionamiento del Estado, estableciendo también un modelo de compras públicas electrónicas. La Dirección de Compras y Contratación Pública está diseñada de manera distinguible de su antecesora, una decisión premeditada del legislador. Así es diseñada bajo un modelo conceptual-institucional en que la Dirección es la mandataria de los Órganos Públicos, en nombre de quienes realizan los procedimientos necesarios para adquirir lo deseado. Sin embargo, el impulso progresista que llevó a establecer una plataforma en línea a través de la cual son realizadas estas compras dio pie a problemas únicos y de rápido desarrollo. La naturaleza de estos problemas fácticos que afronta la Dirección lleva a la creación, por parte de los funcionarios, de un Departamento de Observatorio y su gestión de reclamos o denuncias, dotada de facultades de control aparentemente ajenas a la legislación, pero necesarias y aceptadas por los particulares. Prima, ante todo, la búsqueda de una administración eficiente en una era de transformación electrónica, y aquello siempre fue la intención, la Dirección solo actúa como ha sido predeterminada a actuar. Pero ¿es suficiente dejar que los mismos funcionarios de la Administración realicen esta transformación electrónica? ¿Es eficiente o suficiente el modelo conceptual con el cual se encuentra diseñada la Dirección?