Islas Públicas Flotantes : una respuesta a la problemática de la privatización del borde de los lagos

Abstract

Los más de 300 lagos y lagunas existentes en Chile cubren una superficie total de unos de 11.000 km2. No obstante, actualmente existe un déficit de playas o áreas de uso público en nuestros bordes lacustres, debido a su accidentada geografía y, en especial, a la privatización no regulada de sus riberas. En 2019 el Ministerio de Bienes Nacionales recibió unas 1.500 denuncias por problemas de acceso a las playas a lo largo de nuestro país¹, ya sea porque las personas han sido expulsadas de estas o porque los propietarios han denegado el acceso, privatizando caminos y adueñándose completamente de las playas que están frente a sus terrenos. Por otra parte, existe un mercado de islas privadas ubicadas en los lagos, cuyo acceso es exclusivo para propietarios o arrendatarios; sin ser ilegal, esta práctica incrementa la privatización y la segregación de los lagos y lagunas. Cabe recordar que la Ley de Concesiones Marítimas² y su Reglamento³ resguardan el libre acceso y circulación a los terrenos de playa de lago, limitados por las líneas de aguas mínimas y máximas, en tanto son bienes nacionales de uso público⁴. De manera que no existe sustento legal para exigir un paso público en los casos donde el nivel de escarpado del borde lacustre define la inexistencia de playa (por no existir diferencia entre las aguas mínimas y máximas). Este proyecto de título nace desde la inquietud de poner en boga esta problemática y de la necesidad de abrir una discusión político-social. El proyecto se desarrolla en base a un caso crítico que podría ser replicable en otros lagos con la misma problemática. Se propone crear nuevos suelos de uso público mediante un archipiélago compuesto por fragmentos flotantes, cuyo programa responde al imaginario de un balneario y busca mitigar los impactos de la situación actual de privatización de los bordes lacustres.