Abstract | dc.description.abstract | Desde la creación del programa nacional de Farmacovigilancia el año 1995, ha habido un interés creciente por la Farmacovigilancia en el país, actividad que se encarga de la detección, evaluación, comprensión y prevención de las reacciones adversas al medicamento (RAM).
Este aumento de interés por la seguridad de los medicamentos y Farmacovigilancia, desencadena la creación del Centro de Farmacovigilancia (CFV) del Servicio de Salud Metropolitano Sur (SSMS) el año 2011, el cual se ocupa de las RAM y de las fallas de calidad de los productos farmacéuticos. En este trabajo se evaluará el funcionamiento del Centro de Farmacovigilancia del Servicio de Salud Metropolitano Sur (CFV) desde el inicio de las actividades de Farmacovigilancia en el año 1996 hasta el año 2015.
Para realizar este análisis, se hizo un gráfico con todas las notificaciones que han emitido todos los centros notificadores del SSMS desde 1996. Se caracterizaron en total 1169 notificaciones de sospecha de RAM que fueron emitidas durante los 4 años de funcionamiento del centro (período 2012 -2015), se visitaron y evaluaron 6 de los 7 centros notificadores del SSMS y se analizaron las actividades del centro de Farmacovigilancia en el año 2015.
Se observó que las notificaciones han evolucionado favorablemente, destacando que el aumento de las notificaciones siempre ha estado relacionado a la promulgación de leyes que regulen la Farmacovigilancia y, además, de la creación de un sistema de reporte en línea (Sistema RED-RAM).
En relación a la caracterización de las RAM, se obtuvo que las RAM fueron más frecuentes en los hombres (54,4 % de las notificaciones), en el grupo etario que va entre los 18 y 64 años, con un 49,7 % de las notificaciones, que en su mayoría las notificaciones provinieron del Hospital Barros Luco (54,7 %) y que el principal profesional emisor de las notificaciones fue el químico farmacéutico (80,0 %).
Las familias de fármacos sospechosos que estuvieron más involucrados en las RAM, fueron los antiinfecciosos para uso sistémico y los antineoplásicos e inmunomoduladores, entre ambos concentran el 58, 0% de los fármacos sospechosos de las RAM; con un predominio de los antiinfecciosos, que registraron 577 notificaciones, seguido de los fármacos que afectan al sistema nervioso y al sistema digestivo y metabólico, con 188 y 156 notificaciones respectivamente.
Según su presentación clínica, las reacciones que afectan a la piel y el tejido subcutáneo fueron las predominantes, con un 24,0 % de las notificaciones, seguido de trastornos gastrointestinales con un 13,3 % de los casos. Mientras que, los trastornos metabólicos y nutricionales y los del sistema nervioso acumularon un 8,4 % y 7,5 % de las notificaciones respectivamente. En relación al análisis de cada centro notificador, cada uno de ellos tiene su método propio de detectar las RAM, predominando las notificaciones voluntarias por profesionales de la salud y por Farmacovigilancia activa.
En cuanto a los recursos humanos y físicos para realizar la Farmacovigilancia, lo ideal sería que todas las unidades de Farmacovigilancia se asemejaran a lo que ocurre en el Hospital Barros Luco.
El enfoque de las actividades del centro de Farmacovigilancia del SSMS durante el año 2015, estuvo en la búsqueda de estrategias de difusión y promoción de la Farmacovigilancia, manteniendo la contingencia y el interés por este tema en los profesionales de salud pertenecientes al SSMS.
Finalmente, el centro de Farmacovigilancia del SSMS ha sido esencial para mejorar el uso racional de medicamentos, ya que ha aportado una gran cantidad de conocimientos, que han permitido identificar los tipos de fármacos o grupos de pacientes con mayor riesgo de desarrollar reacciones adversas | es_ES |