Lo intempestivo y lo figural: dos lecturas contrapuestas de Después del diluvio, y dos novelas históricas de Carlos Droguett, Supay el cristiano y 100 gotas de sangre y 200 de sudor

Abstract

El trabajo escritural de Carlos Droguett se concentra principalmente entre los años 1940 a 1973. Su escritura desde el comienzo adquiere la dimensión de un proyecto literario con claro carácter programático. Uno de los vínculos que permite leer la literatura de Droguett como un todo organizado por un principio constructor es su relación con la historia, particularmente, el proceso de reescritura que realiza de ésta. Así, por ejemplo, en Los asesinados del Seguro Obrero (1940) y 60 muertos en la escalera (1953) reescribe la matanza del seguro obrero acontecida el 5 de septiembre de 1938; Eloy (1960) refiere las últimas horas de Eleodoro Hernández Astudillo más conocido como Eloy; El compadre (1965) relata la historia de Ramón Neira cuyo telón de fondo es la asunción de Pedro Aguirre Cerda a la presidencia representando al frente popular; 100 gotas de sangre y 200 de sudor (1961) y Supay el Cristiano (1967) narran los primeros años de la Conquista de Chile; El hombre que trasladaba ciudades (1973) relata la historia del conquistador Juan Núñez de Prado, quien trasladó y fundó la ciudad de Barco en tres ocasiones. Matar a los Viejos (póstuma, 2001) está ambientada en la Dictadura Militar en Chile y Sobre la ausencia (póstuma, 2009) refiere la misa que se realizó después del Golpe de Estado a la cual acudieron los cuatro generales de la Junta Militar y los últimos presidentes de Chile.