Comunidad, Memoria y Patrimonio en una aldea rural. La comunidad del Almendral y su perspectiva del patrimonio local

Abstract

El patrimonio se ha vuelto un ámbito que cobra cada día más adeptos. Se transforma en un comodín que une cultura e identidad, dinamizando símbolos y sensaciones de pertenencia. Seduce como atractivo a cada vez más turistas interesados en experiencias y aprendizajes de territorios otros. Es cada vez más, una arena de la gestión pública y de la administración del poder local, regional y nacional, al sancionar financiamientos para la recuperación y difusión patrimonial, congraciándose con una ciudadanía ávida de inversiones culturales, e inoculando un discurso oficial y legitimado de la historia y la identidad. Actualmente, los procesos que explican la ampliación del ámbito de lo patrimonial, son diversos, y dicen relación con las rápidas transformaciones que impone un capitalismo tardío tecnologizado y globalizado que afecta los vínculos culturales y representaciones identitarias, espacios y territorios; la necesidad de mantenerse orientados por ciertos lazos socioculturales e históricos, a ciertas identidades nacionales, regionales, comunitarias, étnicas, que nos permitan reconocernos como parte de un colectivo en un contexto de globalización que tiende a la homogeneización cultural; la destrucción de los legados culturales en situaciones bélicas; la turistificación de los bienes culturales y áreas naturales en diversas escalas (Prats, 2012)